De la represión al diálogo, el paso del modelo de erradicación boliviano

“Cuando hablamos del modelo fallido de la época neoliberal, hablamos del anterior modelo de erradicación de cultivos de hoja de coca previo al año 2008, es decir, cuando en nuestra Bolivia existía un modelo represivo"

La erradicación de la hoja de coca en Bolivia, tuvo momentos históricos que representan también la lucha del pueblo boliviano en busca de la dignidad y soberanía en sus decisiones, situación destacada por el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, que presentó las diferencias entre los modelos en la época neoliberal y desde 2006 con la victoria de un Gobierno Popular.

 

“Cuando hablamos del modelo fallido de la época neoliberal, hablamos del anterior modelo de erradicación de cultivos de hoja de coca previo al año 2008, es decir, cuando en nuestra Bolivia existía un modelo represivo y que priorizaba el uso de la fuerza contra el pueblo cocalero campesino para la erradicación forzosa de cultivos de hoja de coca”, rememoró la autoridad.

 

Recapituló que, en el periodo neoliberal en Bolivia, el modelo de erradicación era dictado directamente desde Estados Unidos, pues incluso la Ley 1008 llegó a nuestro país en inglés; se priorizaba la represión y la presencia de las FF.AA y de la Policía Boliviana. Castigando al microtráfico y dejando en libertad a los grandes productores, resultado de ello, hasta el año 1997 se contabilizó a 33 campesinos muertos, más de 570 heridos y 27 efectivos policiales y militares muertos.

 

“Tenía la política de “Coca Cero” de erradicación forzosa (…), este modelo no era nada más que la representación evidente de lo que vivía Bolivia aquellas épocas, gobiernos poco democráticos, que llegaban al poder con la democracia pactada, una economía neoliberal que privatizó todos nuestros recursos naturales dejando al Estado débil y genuflexo ante las potencias extranjeras y por si fuera poco subordinando el país a intereses ajenos al propio”, indicó.

 

Acotó que, durante 2000, 2003 y 2005, el pueblo boliviano se levantó exigiendo la nacionalización de los recursos naturales, una nueva Constitución Política del Estado y la defensa de la sagrada y milenaria de hoja de coca, para recuperar la dignidad de nuestra Patria.

 

“Es así que Evo Morales, máximo dirigente de las 6 federaciones del Trópico se convierte en presidente de nuestro país con una larga historia de resistencias a la erradicación forzosa de los cultivos de hoja de coca, introdujo el concepto de la concertación para la erradicación y ya no la fuerza como lo era en las épocas neoliberales (…), la política de reducción de cultivos de coca de manera concertada se consolidó el 2017 con la aprobación de la Ley 906 General de la Coca”, añadió.

 

Desde ese entonces, el modelo boliviano de erradicación y racionalización de la hoja de coca, se ejecuta con el Control Social de Dirigentes para ejercer controles internos y así mantener el límite de cultivos permitidos, y las Fuerzas de Tarea Conjunta (FTC) trabajan para erradicar, en base al diálogo y la concertación, sin represión, lo cual es reconocido y elogiado por países de la región y organismos internacionales, producto de ello, en 2021 se logró erradicar 9.457 de hoja de coca.